El 30 de marzo de 2010 tuvo lugar el apagón analógico, prácticamente en toda España. Al principio de este cambio, solo veíamos ventajas pero mientras que pasaba el tiempo trajo consigo numerosos descontentos a nuestro país, ya que se han producido demasiadas quejas contra la televisión digital terrestre.
La TDT vino acompañado de un mayor número de canales (que la mayoría no tienen señal o simplemente que el aumento del número de canales es una cosa sin mucha importancia ya que casi toda la población sigue viendo los mismos canales que había anteriormente. Aún hay otro defecto respecto a este aumento, que resulta ser que los nuevos canales son repeticiones de canales ya existentes), contenidos más variados y mejor calidad de imagen y sonido, pero la mayoría han tenido problemas de sintonización y sobre todo muchas perdidas de señal que te hacen perder el sonido y la imagen por pocos minutos e inclusos segundos, pero suficiente para no enterarse de algún dato importante.
Y llego a la conclusión de: ¿Habrá valido la pena ese apagón analógico?
No hay comentarios:
Publicar un comentario